La infanta Sofía sufre un accidente de coche durante una clase de conducción: Letizia queda en shock al verla
La tranquilidad veraniega de la familia real española se ha visto interrumpida por un inesperado incidente que ha encendido las alarmas en Zarzuela. La infanta Sofía, hija menor de los Reyes de España, sufrió un accidente de coche este lunes pasado mientras recibía una clase de conducción, en el marco de su preparación para obtener el permiso de conducir. Aunque no se reportan heridas graves, el estado en que llegó a casa dejó a la reina Letizia profundamente impactada.
Una clase que terminó en susto
Fuentes cercanas al entorno real informan que Sofía se encontraba al volante, bajo la supervisión de un instructor, cuando perdió el control del coche al tomar una curva y colisionó contra una valla de protección. A pesar de que el impacto no fue severo, el airbag se activó y la infanta sufrió una contusión leve en el brazo, además de un fuerte susto emocional.
Tan pronto como fue trasladada de vuelta a Zarzuela para ser evaluada por los médicos, la reina Letizia rompió en llanto al ver a su hija alterada, pálida y visiblemente afectada por lo ocurrido.
Letizia reacciona con medidas médicas inmediatas
Según las mismas fuentes, Letizia ordenó de inmediato un chequeo médico completo, no solo para descartar cualquier daño físico, sino también para atender el impacto psicológico que el accidente podría tener en su hija. Los profesionales de Zarzuela activaron un protocolo de seguimiento que incluye consultas con especialistas, una dieta balanceada y actividad física adaptada, todo para asegurar una recuperación integral.
Esta reacción se suma a la preocupación que Letizia ya venía manifestando por los cambios físicos y de hábitos que notó en Sofía tras su paso por Gales, donde la infanta disfrutó de mayor libertad y, según algunos, habría descuidado sus hábitos alimenticios.
Gales, la libertad… y sus consecuencias
Durante su estancia en el internado galés, Sofía experimentó por primera vez una vida lejos del estricto control materno. Descubrió la comida rápida, los dulces y un ritmo de vida más flexible, lo que afectó su estado físico de forma visible. Letizia, conocida por su disciplina en temas de salud y alimentación, no pudo ocultar su decepción al notar que su hija había ganado peso y perdido el tono físico que tanto había cuidado en Zarzuela.
El accidente solo reforzó su determinación de “reconducir” a Sofía hacia un estilo de vida más saludable y controlado. Sin embargo, esta vez la estrategia parece ser más moderada: dietistas y endocrinos de confianza han diseñado un plan equilibrado y sostenible, buscando no solo resultados, sino también el bienestar emocional de la joven.
Un verano diferente para la infanta Sofía
Este verano, en lugar de viajes, eventos públicos o vacaciones con amigos, Sofía pasará su tiempo enfocada en recuperarse, retomar rutinas saludables y prepararse para una nueva etapa de responsabilidades. El accidente, aunque leve, ha dejado huella en la familia real, especialmente en una madre como Letizia, que no tolera la improvisación ni la falta de control.
Desde Zarzuela no se ha emitido aún un comunicado oficial, pero el hermetismo solo confirma que el asunto se está manejando con extrema discreción. La infanta Sofía, joven y en plena formación, vive así un nuevo capítulo donde la independencia también trae lecciones duras… y curvas inesperadas.
